Posiblemente en lo que respecta a “Las reuniones diarias” coincidamos de su importancia para el éxito de la gestión de nuestros proyectos, aunque en la práctica realizarlas desde un inicio hasta el final de obra es todo un reto.
Last Planner System, pretende llevar los objetivos generales de proyecto a la realidad del día a día, transforma las ideas generales a programas reales. En mi caso la Pull Session nos lanzó 56 actividades (programación a largo plazo) para acabar dividiendo la programación en dos zonas generando de cada actividad una media de 4 subtareas (programación a corto).
Las reuniones diarias no duraban más de 15 m. Se organizaban a primera hora de la mañana , un poco antes de iniciar los trabajos. En las reuniones el responsable de cada subcontrata repasa con todo su equipo la planilla de trabajo , se confirma el hito diario y se comprueban que tanto los medios como los materiales están preparados y dispuestos.
Para aprovechar de forma rápida y ágil la información de las reuniones, organizamos un grupo de WhatsApp formado por las subcontratas que intervienen durante la semana, de esta forma una vez acabada la reunión diaria el responsable del equipo envía un mensaje con un simple “ok” al administrativo de obra o en su defecto al jefe de producción, lo ideal es hacerlo coincidir con el responsable del control de acceso a obra. Si se producía alguna incidencia (siendo esto lo habitual) se añadía una vocal más un número (OK+A/2) , es decir con un simple “ok” la reunión se había realizado sin incidencias, si lo acompañaban con letras y números nos proporcionaba información sobre la incidencia, la letra indicaba el tipo de incidencia (A= sin material, B= sin medios auxiliares, C= tajo sin despejar, X= otro) y el número la urgencia (1= urgente, 2=tiempo de espera 30m, 3= tiempo de espera 1h).
En las reuniones diarias puedo detectar de primera mano la implicación de cada subcontrata. La colaboración de cada una de las personas que conforman los equipos me simplifica enormemente la resolución de pequeñas interferencias que si no se resuelven en ese momento se convierten en restricciones no contempladas en la planificación y además liberas al encargado de obra y al jefe de producción de continuas consultas del tipo «y ahora dónde voy? por dónde empiezo? qué hago si no está reparado el tajo? … en definitiva todos en la obra saben lo que tienen que hacer.
Si perseguimos aumentar la producción, las reuniones diarias reducen la variabilidad y permite el flujo.
“Los proyectos cada vez son más complejos y para construirlos debemos colaborar. La colaboración exige confianza y la confianza es el resultado de la generosidad de las partes.”
Por último y para acabar este ciclo de Experiencias LPS, simplemente comentar que LPS no es tan sólo una herramienta de planificación y control de la producción sino una metodología para conseguir la colaboración y el compromiso de todas y cada una de las personas que integran el proyecto.
Agradecer a todos los que han colaborado en la construcción del Centro Socio Asistencial por su “buen hacer“ y por el compromiso adquirido con el proyecto ; Excavaciones Alicante, Anifraer, Cimenco, Cytem, Ase, Hispana, Esluz, Derivama, Aluminios Candela, Fajovi, Decokeden, Los Cobollos, Sten, Pebasa Innova, Cerrajería Ismael, Gam, Hune, Farell, Terra Pilar, Cum, Seguridad Levante, Gramamur , Relosa , Dicorte Levante, y Ecisa.