«…el alumno ha visto la solución al verdadero problema: ¡los caracoles se escapan porque a la caja le falta un tapón! ¿Solución? Poner un tapón. ¿No es obvio?
El tapón no resuelve la resta presente. Los errores del pasado no tienen ya solución y los caracoles se han escapado. Ocho de ellos, nada menos, que ya son caracoles. Pero poniendo un tapón no solo nos aseguramos de que los caracoles no se escapen. También evitamos cualquier resta futura para saber cuántos caracoles se escaparan de la caja.
Tener la certeza de que no se escapará ningún caracol es casi más importante que saber los que ya hemos perdido. Por fortuna, siempre hay tiempo para la mejora. Así que ya sabéis, más tapones para el futuro, y menos restas para justificar los caracoles perdidos.